Se han llevado mis memorias y no tengo colores para quebrar lo oscuro de tu cielo, no me mires que el brillo miel de tus ojos se esfumo y yo solo tengo ojos para un buen libro… la hoja queda en blanco, sin un principio, sin un final y no me provoca dibujar, ahora que no recuerdo tampoco mi nombre y parezco un loco por hablar con quienes no veo, solo me acompaño de mi sombra, mientras voy caminando entre pétalos de rosas azules y espina que no duelen y es que no recuerdo aquel derrumbe.

Texto: Andrés Miles © All rights reserved